Otro año más acaba la romería de El Rocío, y otro año mas muchos animales sufren a causa de esta festividad. No nos cabe la menor duda que la mayoría de los romeros cuidan a sus animales y no les provocan sufrimiento, aunque es sabido que el camino es un esfuerzo que muchos animales tienen que soportar, donde sufren las inclemencias del tiempo y un nivel de estrés muy alto al que habitualmente no están acostumbrados.
La mayoría de los animales que sufren maltrato y fallecen en esta romería, y otros festejos donde son usados équidos, son los que están destinados al alquiler. En muchas ocasiones son personas inexpertas las que alquilan estos animales, por lo que no son atendidos de la manera correcta, y los cambios en la alimentación pueden acarrearles graves problemas de salud.
Además, en muchas ocasiones, los animales no están en las mejores condiciones para soportar un sobreesfuerzo como es el que les supone El Rocío.
Desde EQUO consideramos que se deberían controlar y evitar estas malas prácticas, perseguir y sancionar los casos de maltrato además de un control de las personas encargadas de los animales, para comprobar si poseen las aptitudes necesarias.