Seis meses han pasado desde que finalizó el dragado de arena del fondo oceánico, hasta que un temporal se ha llevado los 2´5 millones de euros que fue lo que costó rellenar de arena las playas de Rota. Y a estos 2´5 millones hay que sumarles los 6 millones que ya se gastaron hace unos años.
Era previsible, como ya dijimos que ocurriría en junio del pasado año: «EQUO Rota considera que es una actuación en la que se invierte mucho dinero, alrededor de 2,5 millones, y que ésta, aparte de no poner solución al problema real de regresión del litoral, lleva mucho esfuerzo que se esfumará con el primer temporal que llegue.»
El delegado de Playas, Manuel Jesús Puyana, reconoce que el fuerte temporal se ha comido literalmente hasta 4 metros de duna. Si sabemos que cada año se repiten temporales y que cada vez serán más virulentos como consecuencia del cambio climático, que aumenta la periodicidad de los mismos así como el nivel del mar, ¿se habrán enterado que el dragado de arena no es la solución o nos volverán a colocar los tan criticados tubos de los que tanto se quejaron veraneantes y vecinos de la playa de La Ballena?
Ahora, desde el gobierno local se lamentan de la pérdida de arena, ya que prácticamente la totalidad de esta arena ha desaparecido en el mar, y lo peor es que el Ayuntamiento de Rota «espera que las administraciones competentes colaboren en la puesta a punto del litoral roteño de cara a la temporada media y alta de playas.» ¿Cómo? ¿Volviendo a invertir otros tantos millones de euros en arena que en pocos meses volverá al mar del cual nunca tuvo que haber salido? Si es así, el próximo año volveremos a lamentarnos…
Desde EQUO Rota Verdes creemos que el esfuerzo no se debe desperdiciar en invertir millones de euros en acciones que quedan demostradas que no solucionan el problema, sino en estudiar alternativas al dragado y demás aportes artificiales de arena.
Cabría preguntar a la Confederación hidrográfica del Guadalquivir, qué ocurre con los aportes naturales de arena que desde las cuencas fluviales llegaron durante milenios para construir nuestras maravillosas playas, así como preguntarnos e iniciar una profunda reflexión, sobre el uso insostenible y contaminante de combustibles fósiles que aceleran el cambio climático, para generar soluciones serias, integrales y permanentes que además de crear empleo, sean medioambientalmente viables hoy y para las futuras generaciones.
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