Civilizar el planeta, inspiración para 2011
Manifiesto Político de la Coordinadora Verde
Ante la crisis socio-ecológica que padece el planeta y la incapacidad de los partidos tradicionales, es urgente pasar a la acción en el campo sociopolítico. Tenemos que aplicar un modelo social y cultural alternativo que tendrá su oportunidad si no perdemos más tiempo. Es ahora o nunca y debe ser ahora.
Ahora, porque el modelo de desarrollo basado en un crecimiento ilimitado e irracional es insostenible. Si bien durante un tiempo, y sin tener en cuenta los costes ecológicos, dicho modelo pudo dar respuesta a sociedades en busca de una mejora de sus condiciones materiales, en la actualidad ha entrado en degeneración peligrosa para la equidad, la sostenibilidad y la supervivencia.
Los hombres y las mujeres que suscribimos este manifiesto, queremos no solo superar el modelo socio-económico actual sino también cualquier modelo productivista.
En caso contrario, seguiremos sufriendo una crisis energética, climática, de biodiversidad y ambiental de una magnitud sin precedentes. Es urgente conseguir no sólo un equilibrio ambiental sino también un equilibrio que combine: la justicia global con el aprovechamiento de los recursos y las oportunidades de las generaciones presentes con las de las futuras.
Si apostamos por luchar a través de vías pacíficas y decididamente comprometidas, podemos escoger frente a la barbarie, la civilización.
Consideramos que las estructuras económicas y sociales asentadas sobre la presunción del crecimiento ilimitado son intrínsecamente inviables. Podemos así afirmar que el contrato social “crecentista” y “desarrollista” que ha guiado nuestra civilización ha caducado. Se encuentra hoy sin poder ofrecer más respuesta que la de su propia perpetuación. El bienestar en los países del Norte se mantiene a costa de la profundización de la miseria en los países del Sur.
Por tanto, es hora de emprender un cambio ordenado y participativo hacia una sociedad post-industrial de bajo consumo, del decrecimiento de la huella ecológica, del conocimiento y de la innovación, justa, igualitaria y en armonía con el planeta. La ecología política nos abre nuevos horizontes para repensar el mundo y cambiarlo desde la sociedad civil. Con una visión profundamente radical y sin rechazar el reformismo de los pequeños pasos.
Hacia una sociedad sostenible, equitativa y participativa.
Reorganizar nuestra sociedad exige saber a donde se quiere llegar. El modelo de vivir mejor con menos hacia el que queremos caminar será necesariamente más sobrio, feliz y consciente de los límites ecológicos. El despilfarro, la sobreproducción o la sobre-explotación de la naturaleza será visto como un indicador reprobable de ignorancia o de falta de solidaridad. Los recursos naturales y la biodiversidad deberán ser considerados como un bien común mundial e inter-generacional.
Necesitamos un nuevo modelo productivo adaptado a las circunstancias y retos del siglo XXI, una sociedad más ecológica y equitativa, que desarrolle la concienciación y la educación de sus miembros y facilite y estimule el desarrollo de la creatividad y la autonomía humana en sus múltiples facetas. El crecimiento que defendemos no es el económico ni el productivo, sino el desarrollo de las capacidades y facultades del ser humano.
Apostamos por una economía que respeta los ciclos de la biosfera, y pretende resolver las graves deficiencias del mercado. La economía ecológica, social y alternativa, la economía de los cuidados, es piedra angular del proyecto verde. Esta nueva economía o “Green New Deal” como paradigma dominante es la mejor fuente de empleo y actividad humana sostenible.
El cambio verde tiene que responder además a lo que se ha convertido en la tercera preocupación social de los españoles, tras el desempleo y la crisis económica: la clase política. La desafección social, la corrupción, el descrédito de los partidos e incluso de las instituciones requieren también de formas innovadoras y cooperativas, de participación de la ciudadanía en la política para que la democracia, como autogobierno social, recupere su verdadero sentido. Tenemos que implicarnos conjuntamente en este reto de devolver al trabajo político la credibilidad, el prestigio y la estima moral que nunca debió perder.
Es hora de ofrecer un nuevo contrato social y ecológico sobre el que se puede asentar el nuevo mundo que queremos construir.
El camino empieza en las elecciones municipales de mayo-2011
Nuestro primer reto en esta nueva fase del proyecto verde es conseguir pueblos y ciudades sostenibles, sobrios, felices, solidarios, conscientes, preparados ante la escasez, resilientes y con una rica vida comunitaria.
Para ello, convocamos a cuantas personas y organizaciones políticas, asociativas, sindicales, intelectuales, empresariales, etc., estén dispuestas a poner su capacidad al servicio de este proceso de cambio ineludible desde la generosidad social, la visión política y la responsabilidad histórica.
Hacemos un llamamiento en particular a las personas y organizaciones que conforman el movimiento ecologista (ecopacifistas, ecofeministas, ecosocialistas, medioambientalistas, conversacionistas, animalistas, etc.) y en general a quienes, provengan de donde provengan, piensan que la crisis socio-ecológica es el nuevo eje prioritario.
Organicemos en cada pueblo asambleas verdes y presentemos cuantas listas electorales ecologistas sean posibles en las próximas elecciones municipales bajo un paraguas común, con el compromiso de promover este manifiesto, junto con el de diseñar conjuntamente y respetar el programa colectivo que se apruebe en su día.
La transición hacia una sociedad sostenible y equitativa es posible, y la tenemos que promover con ilusión y sin complejos.