A través de la resolución 44/236, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el día 13 de octubre como el Día Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales. El objetivo de la conmemoración es aumentar la concienciación sobre cómo las personas están tomando medidas encaminadas a reducir el riesgo frente a los desastres.
El lema de este año lleva por título: «Mujeres y Niñas. La Fuerza (in)visible de la Resiliencia». La “resiliencia” consiste en la capacidad que tienen los seres vivos para sobreponerse a períodos de dolor emocional y traumas. Cuando un sujeto es capaz de hacerlo, se dice que tiene una resiliencia adecuada, y puede sobreponerse a contratiempos o incluso resultar fortalecido por los mismos.
Con la celebración de este día se pretende empoderar a las mujeres y a las niñas para que contribuyan al desarrollo sostenible a través de la reducción del riesgo de desastres, en particular en el tema del medioambiente y en las áreas clave de gestión de recursos naturales, gobernanza, planificación urbana y uso de la tierra, y planificación social y económica. Las Mujeres y Niñas son potenciales agentes de cambio, ellas son socias valiosas en la reducción del riesgo de desastres y la adaptación al cambio climático; son parte de un significativo porcentaje de la población y se encuentran entre las más afectadas por las emergencias y desastres en todo el mundo. Se trata así de reconocer a millones de mujeres y niñas que hacen que sus comunidades sean más resilientes tanto a los desastres como a los riesgos climáticos y así aprovechar los beneficios de proteger sus inversiones para el desarrollo.
La situación actual confirma que hay que actuar sobre ellas y con ellas, habitamos este planeta más de 7 mil millones de personas de las cuales un 57% son mujeres, de ellas 75 millones no van a la escuela, una de cada tres no llega a secundaria. La mujer invierte el 90% de sus ingresos en el hogar, mientras que el varón lo hace por debajo del 40%. Con estos datos en la mano es fácil entender que lo que se invierta en la mujer revertirá en sus sociedades con más garantías de éxito. De ahí el acierto de dedicar este año los esfuerzos a la incorporación de la mujer en la formulación, planificación y ejecución de políticas ambientales.
La mujer tiene una función fundamental que desempeñar en la preservación de los recursos ambientales y naturales, y en la promoción del desarrollo sostenible porque aún tiene la principal responsabilidad en relación con la atención de las necesidades de la familia y, por consiguiente, constituye una fuerza importante en la determinación de las tendencias del consumo.
La igualdad de género es fundamental para la economía de los países y el desarrollo sostenible no es posible si no existe equidad. Asegurando este axioma estamos sentando las bases de una sociedad más preparada ante los desastres naturales.
La portavoz provincial de Equo Almería, Mar Verdejo, recuerda que su formación quiere aprovechar este día para “recordar que estas ideas forman parte de nuestro programa electoral y por tanto que constituyen ejes de nuestra acción cotidiana y de las reivindicaciones que continuamente hacemos para que, tanto dentro como fuera de nuestro país, se avance en la igualdad de género y en un desarrollo sostenible que ayude a prevenir desastres naturales”.