Para EQUO la transparencia y la participación en las instituciones son esenciales en el desarrollo de las nuevas formas políticas que vamos practicando desde 2011.
El Ayuntamiento de Granada es uno de los más opacos del Estado, ocupando el puesto 96 de 110 en el ranking elaborado por Transparencia Internacional. Estamos más que convencidos de que esto cambiará tras las próximas elecciones municipales, pero mientras tanto no dejaremos de exigir al Ayuntamiento que ponga a disposición de la ciudadanía toda la información de forma clara, accesible e inmediata, y haga efectiva la participación ciudadana en los procesos de toma de decisiones de nuestra ciudad. Porque nos concierne a todos, porque es nuestro derecho.
El pasado mes de agosto hicimos todo esto aprovechando el periodo de alegaciones al ROM (Reglamento orgánico municipal, por el que se reglamenta el funcionamiento del Ayuntamiento). Se trata del periodo abierto a raíz de una sentencia del TSJA que obligaba al Consistorio a que todos los concejales (independientemente de que tuviesen grupo municipal o no) contasen con los mismos recursos para ejercer su función, y a permitir la grabación de los Plenos por quién quisiera.
En una muestra más de opacidad y falta de voluntad política por la transparencia, el Ayuntamiento recurrió esta última parte.

No fue nada fácil acceder a la documentación de los artículos del ROM que iban a ser modificados. Tuvimos que personarnos en el ayuntamiento, firmar un documento previa presentación de nuestros DNI y verlos en una mesa, vigilados por funcionarios, advertidos de que no podíamos ni sacarlos de allí ni fotocopiarlos ni hacer fotos, tan sólo copiar a mano lo que nos interesase. Es impresionante ver el empeño que le ponen a que sea tan complicado acceder a la documentación y participar, con el claro objetivo de que desincentive a cualquiera a ejercer su derecho (y hasta obligación) de vigilar qué hacen sus representantes públicos.
Los compañeros que estuvimos allí pudimos comprobar que lo del “periodo de alegaciones abierto al público” no es más que una falacia.
En las alegaciones que presentamos en agosto pedimos el cumplimiento de la sentencia y la publicación de las actas de los Plenos, entre otras cosas. Como no obtuvimos ninguna respuesta, la semana pasada lo volvimos a hacer respecto a las actas, y seguiremos, ¡hasta que lo consigamos o los echemos! Nos queda una gran batalla por delante, pero por eso la victoria será aún más dulce.
P.D. Como el movimiento se demuestra andando, pinchando aquí tendréis toda la documentación.