EQUO crítica que los alcaldes de la zona de El Cabril sólo alzan la voz cuando cesan los pagos, pero no ante las amenazas para la salud de sus vecinos

El partido ecosocial entiende que los pagos de ENRESA a los Ayuntamientos de la zona de El Cabril constituyen un histórico y bochornoso soborno, por el que se intercambian serios riesgos para la salud durante siglos a cambio de unas retribuciones que no siempre han redundado en beneficio de la población de esos municipios. EQUO, recogiendo las críticas históricas del movimiento ecologista, considera que esos pagos secuestran la voluntad de la ciudadanía, creando sumisión y dependencia de ENRESA y su Fundación.

Desde que en 1989 se aprobaron los pagos para los primeros municipios, parte del dinero no se ha invertido en una mejora significativa de las localidades afectadas y si leemos atentamente las actas de alguno de los municipios receptores, como Hornachuelos, veremos que parte de estos fondos aseguraban el sueldo de los concejales.

Sin embargo, si han cumplido su objetivo principal, acabar con el importante rechazo social que existía a la implantación del cementerio nuclear de El Cabril. Ese momento marcó un antes y después en la simpatía de los ayuntamientos de la zona hacia las movilizaciones anti-nucleares promovidas por las organizaciones ecologistas, donde antes eran bienvenidas ahora eran rechazadas, ya no servían para presionar al gobierno para la asignación de fondos a los ayuntamientos.

EQUO y el movimiento ecologista  han venido denunciando estas actuaciones, pero sólo con la llegada de la crisis, que hace desaparecer la Fundación ENRESA y con ella las prebendas que repartía, se vuelven a levantar voces críticas, cuando se dan cuenta que el desarrollo perdido no es posible de realizar y que el maná nuclear puede cesar bruscamente.

EQUO encuentra escandaloso que ahora los ayuntamientos de la zona, gobernados por PSOE-IU, PP y PA se lamenten de que no llegan los fondos y amenacen con paralizar las actividades del Cementerio Nuclear. Escandaloso, porque no lo hacen por interés en preservar la salud de sus habitantes y la de sus descendientes, sino por asegurar los ingresos  que venían recibiendo como pago a su servilismo y que desdicen los pronunciamientos públicos de dirigentes de varios de estos partidos contra El Cabril.

EQUO se posiciona claramente contra la energía nuclear para la producción de energía, puesto que genera unos residuos de gran peligro con una vida de centenares o miles de años y existe el riesgo de gravísimos accidentes en las centrales, como en Vandellós, Chernobyl o Fukushima, inaceptables ante la existencia de alternativas limpias y seguras. El único motivo para el mantenimiento de la energía nuclear es la cantidad indecente de beneficios que genera para sus dueños privados, ya que gran parte de los costos se desvían a la sociedad en su conjunto.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *