Los coportavoces de EQUO Andalucía Verdes, Carmen Molina y Francisco Sánchez Molina, y el coportavoz federal de EQUO, Juantxo López de Uralde, trasladarán este viernes nuestra propuesta a representantes de la Consejería. Queremos conocer de primera mano las medidas que contempla el Proyecto LIFE para el lobo y “enriquecerlo con nuestras propuestas”
EQUO Andalucía Verdes mantendrá mañana viernes una reunión con representantes de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno andaluz para trasladarle nuestra propuesta de impulsar un Acuerdo por el lobo en Andalucía, traducido en una política global y clara, con medidas concretas, para la recuperación de esta especie en nuestro territorio.
Tal y como ha expuesto nuestra coportavoz y parlamentaria andaluza, Carmen Molina, “diferentes organizaciones ecologistas llevan años denunciando la falta de interés en la preservación del lobo en Andalucía, tanto por parte de las administraciones como por parte del poderoso sector ganadero y cinegético, que no quieren competidores para sus actividades económicas”.
Aunque desde EQUO reconocemos que últimamente se han dado algunos pasos positivos, como la muy reciente declaración del lobo como especie en peligro de extinción y la implantación del proyecto LIFE, queremos saber en qué consiste exactamente este programa y a qué se van a destinar los fondos con los que se dota el mismo, porque tenemos varias propuestas que hacer.
“La presencia de grandes depredadores como el lobo muestra la salud y la capacidad de un hábitat para mantener un ecosistema rico y variado, lo que constituye un patrimonio irrenunciable para una sociedad avanzada y respetuosa con el entorno”, ha señalado por su parte el también coportavoz andaluz, Francisco Sánchez Molina, que junto a Carmen Molina y el coportavoz federal de la formación, Juantxo López de Uralde, asistirá a la reunión que tendrá lugar este viernes en Sevilla.
Tanto en el Congreso como en el Parlamento Europeo y en los diversos territorios en los que tenemos presencia institucional y social, hemos apostado claramente por la recuperación y protección del lobo como símbolo de un medio ambiente sano, con el convencimiento de que su presencia es compatible con la actividad humana, y dedicando esfuerzos a su protección como especie, a mejorar su percepción social, y a promover medidas de convivencia entre la ganadería, fundamentalmente, y el lobo.