Desde el partido político EQUO se pide a la Junta que garantice el suministro básico de energía y agua y que lo desvincule de cobrar el salario social.
Para EQUO si no hay dinero para que dicha garantía sea universal sí que debería serlo para todas aquellas familias que estén por debajo de un umbral de ingresos, sean éstos por percepción de prestaciones sociales o por trabajos remunerados, pero no suficientes. Para la coportavoz de EQUO Andalucía, María Merello, “No debemos olvidar que tan mal lo están pasando los subempleados como los desempleados y no se puede discriminar a quien aún estando trabajando no consigue llegar a un mínimo nivel de ingresos”.
Asimismo se pide un plan de ayudas para la instalación de sistemas de autogeneración en aquellas viviendas donde sea posible. Para Esteban de Manuel, coportavoz de EQUO Andalucía, “A medio plazo el fomento de las instalaciones de autogeneración haría disminuir el coste económico que la medida anterior tenga para la Administración, con lo que los ciudadanos y la Junta salen ganando”.
Con todo ello se persigue un doble objetivo, que todo el mundo tenga un acceso mínimo a la energía y que dicha energía provenga en su mayor parte de la autoproducción, con lo cual se garantiza ahorro económico y beneficio ambiental y social.
Cabe destacar que según diferentes informes en España ya existen un 10% de hogares donde este invierno no se podrá, por ejemplo, encender la calefacción por falta de medios para afrontar el coste de la factura energética. La pobreza energética empieza a ser otro de los distintivos de esta crisis que obliga a miles de familias a tener que elegir entre comer y mantener unas mínimas condiciones de vida.